Me gusta viajar ligero pero reconozco que en casa vivo con mucho más de lo indispensable. Eso sin contar con que pinturas, dibujos, cuadernos, libros ganan terreno día a día.
Este espacio nace con la intención de abrir una puerta a una parte muy concreta de mi trabajo. Mi diario ilustrado lo componen un grupo de cuadernos que me han acompañado casi desde los inicios de mi trayectoria como pintor. Los temas tratados al igual que los orígenes de estos cuadernos son diversos. Tengo cuadernos pobres, preciosos, comprados, regalados, cambiados, hechos a mano, traídos de algún viaje lejano, o cercano… En su interior nos vamos ha encontrar con: páginas en las que lo importante es lo escrito, otras en las que no hay nada escrito, páginas pintadas, rasgadas, elementos añadidos al cuaderno, dibujos cuidados, dibujos totalmente despreocupados, páginas que sencillamente narran un momento de un día cualquiera, dibujos que hacen referencia a una parte concreta de mi obra, letras colocadas a modo de jeroglífico que ya no se descifrar, y espero que muchas otras cosas que no recuerdo. Aunque parezca extraño, ya que su función original era la de ser cuadernos de ideas, raramente consulto estos libritos, que se han convertido en la parte más íntima de mi obra. A partir de ahora voy a ojear, con quien quiera acompañarme, las páginas que he ido dejando atrás. Quizá con la intención de no perderme hoy y ser entendido mañana.
4 comentarios:
seguro que lleva más de lo necesario, lo justo necesario tiene que dejarte mover...
(no vayas así a México)
Me gusta viajar ligero pero reconozco que en casa vivo con mucho más de lo indispensable. Eso sin contar con que pinturas, dibujos, cuadernos, libros ganan terreno día a día.
Hya que ver como sin apenas darnos cuenta, nos quedamos casi sepultados por lo "necesario"
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